Cuando estaba preparándome para el webinario del 13 de agosto,
Introducción a “Guía de recursos para juntas parroquiales", leí mucho de la Guía de recursos para juntas parroquiales (lo pueden comprar
aquí). Hay temas tan interesante para ayudar a todas las personas en cualquier situación o puesto de liderazgo. Desde el primer capítulo vemos que ser miembro de “las juntas parroquiales (o los comités del obispo) deberían ser uno de los ministerios más apasionantes y gozosos de la iglesia”. También leemos que hemos sido llamad@s para formar parte de un ministerio sagrado en nuestras iglesias. Cuando le preguntamos a Hugo Olaiz, traductor de la Guía al español, cuál capítulo deberíamos leer primero nos dijo que el Capítulo Cuatro: La visión y el pensamiento estratégico. La misión es el llamado que Dios le hace a nuestra congregación y es “una imagen esperanzadora de un futuro mejor, un futuro que deseas crear a través del impacto positivo de tu misión en la iglesia y el mundo” (p. 32). Creo que es un buen punto de partida para el resto del libro porque nos hace pensar y ver el fundamento de nuestra Iglesia. Al final de cada capítulo hay preguntas y recursos y la primera pregunta al final del capítulo cuatro me llamó mucho la atención y me hizo pensar en mi propia congregación (Iglesia Episcopal San Mateo, Houston, TX): “¿Cuáles son las tres fortalezas principales del ministerio de tu congregación?” (p. 41). Esta pregunta y muchas otras son excelentes para comenzar un diálogo entre líderes que va más allá de las paredes de nuestra Iglesia. Son preguntas para hacerte pensar y discernir tu llamado y el llamado de tu congregación. Mucha gente nos visita para ver qué estamos haciendo – algunos hasta nos preguntan cuál es el secreto de nuestra congregación que sigue creciendo y siendo muy activa. La respuesta puede ser: nuestra fortaleza principal es que estamos anclados en la Biblia, la Oración, y la relación con la Trinidad. Todo lo demás cae bajo esos tres fundamentos. La prédica, la música, los eventos, los programas, la comida – todo lo que hacemos está basado en esos tres principios.